lunes, 26 de abril de 2010

Pedido de disculpas

Luego de la nota anterior « Escrache », el Papa salio a la Plaza San Pedro a pedir disculpas por lo sucedido agregando que se ponia a entera disponibilidad de la justicia. Con suma urgencia un obispo le aclaro al oído a Benedicto que la nota del Blog Vesaliusnotdead no hacia referencia a ningún eclesiástico, a lo que el Papa agrego "Perdon, fue un reflejo!".

sábado, 24 de abril de 2010

Escrache

Resulta que los del bar no podían escuchar música, ni tomar whisky, ni jugar al pool, ni criticar las noticias porque la pareja que vivía al lado hacia tanto ruido que no los dejaban concentrar en sus menesteres.

Intentaron todo, golpearon la pared gritando "quieren dejar de coger!". Hicieron una manifestación donde todos iban en procesión con carteles con la misma consigna que coreaban "paren de coger!, paren de coger!".

Pero todos esos esfuerzos fueron estériles (los del pueblo, no los de la feliz pareja).

 

Finalmente, decidieron solo ponerles un cartel en la puerta para que todo el que pase por allí sepa de qué se trata. Como una ironía de la vida, el N° de altura de la calle del bar es el 69.

 

Extras (tercera parte)

Vuelvo a la última pelea de boxeo que les conté. La de Henry Maske Vs. Virgil Hill.

Los combates de Henry Maske estaban precedidos de alguna introducción musical, de esas para poner a la gente en ambiente. Su productor se asombro del éxito de Vangelis "Conquest of paradise" al ser promovido a través de los combates de Maske.

Este Productor alemán, Frank Peterson ya había trabajado con Brightman desde 1991, y dada la edad de Maske y porque se lo venia rumoreando "entre bambalinas', decidió tener a mano un tema musical por si el veterano boxeador tomaba la decisión de retirarse el título de la canción en alemán "Mit dir werde ich fortgehen".

 

En la pelea contra Hill llego el momento. Con una audiencia televisiva de más de 21 millones de televidentes Bocelli y Brightman interpretaron la canción. Al mes de diciembre, el single "Time to say goodbye", publicado por East West, habío alcanzado el número uno en el cuadro alemán de sencillos, con ventas estimadas de 40.000 a 60.000 por día y las proyecciones de al menos un millón antes de que finalice el año. En febrero del año siguiente, el tema ya había roto todos los récords de ventas en Alemania con 1,65 millones de ventas, y eventualmente llegar a más de 3 millones de copias vendidas. También es el más vendido en el mercado único en Bélgica.

"Con te partirò" llegó al número dos en el United Kingdom Singles Chart en mayo del 1997, y alcanza el oro. Se mantuvo en el top 30 durante otros dos meses, ayudado por el constante rating de radio en la BBC Radio 2.

 

El dúo se incluyó en 1997 en el álbum Timeless de Sarah Brightman.

 

Pero, ¿Quién es Sarah Brightman?

sábado, 17 de abril de 2010

Extras (segunda parte)

Seguramente no habrá escapado al lector, o lectora de este blog que la obra citada anteriormente se compone de dos secciones bien diferentes y que las partes en italiano son de La Wally, con su aria "Ebben?... Ne andro lontana" (puesta nuevamente en el cuadro de honor gracias al film Diva). Como síntesis argumental la pueden encontrar con una simple búsqueda en Internet, les cuento que esta aria interviene en el momento en el que la Wally decide irse definitivamente de la casa familiar.

 

v    Para los amantes de los clásicos les recomiendo a Mariana Nicolesco (aunque es visualmente la típica soprano) http://www.youtube.com/watch?v=vAhRRafWpKo

v    Renee Fleming hace una versión casi insuperable, con una voz que en el momento del recital estaba en plena forma, magnifica, para la posteridad absoluta: http://www.youtube.com/watch?v=qdFBA2r-FiE&feature=player_embedded

v    Para los que prefieren las sopranos con una figura mas esbelta Angela Gherorghiu propone una versión impecable y muy bien trabajada (aunque yo la veo demasiado técnica y la prefiero en  "O mio babbino caro") http://www.youtube.com/watch?v=7f5DNpB91C8&feature=player_embedded

v    Por supuesto La Calas, Montserrat, etc etc…

v    Pero para mi quien da un verdadero sentido al adjetivo "sublime" es la fantástica, la maravillosa, la delicadísima, Renata Tebaldi…. ¡Jamás suficientemente bien adjetivada! Les propongo que escuchen esta versión y entiendan cabalmente el sentido de sublime, de elevarse con la música, de ser transportado en un apacible viaje por el reino de lo celestial. http://www.youtube.com/watch?v=FdiUmFiVY4k&feature=related

 

Extras (parte 1)

Una curiosidad gracias a la cual di con el boxeador Henry Maske fue que mi soprano favorita cantó A QUESTION OF HONOUR, en el preludio del Campeonato Mundial de Boxe entre Henry Maske y Graciano Rocchigiani. Les recomiendo que lean la letra.

 

http://www.youtube.com/watch?v=_vBYwI_DoZc

 


A Question Of Honour

 

Ebbene? ... N'andrò lontana,
Come va l'eco della pia campana,
Là, fra la neve bianca;
Là, fra le nubi d'or;
Là, dov'è la speranza, la speranza
Il rimpianto, il rimpianto, e il dolor!

Ebbene? ... N'andrò lontana,
Là, dov'è la speranza, la speranza
Il rimpianto
Sola e lontana!

Two men collide
When two men collide, when two men collide
It's a question of honour
Two men collide
When two men collide, when two men collide
It's a question of honour
Two men collide
When two men collide, when two men collide

If you win or you lose,
It's a question of honour
And the way that you choose,
It's a question of honour

I can't tell what's wrong or right
If black is white or day is night
But I know when two men collide
It's a question of honour

If you win or you lose,
It's a question of honour
And the way that you choose,
It's a question of honour
If you win or you lose,
It's a question of honour
And the way that you choose,
It's a question of honour

I can't tell what's wrong or right
If black is white or day is night
I know when two men collide
It's a question of honour

Ebbene? ... N'andrò lontana,
Come l'eco della pia campana,
Là, fra la neve bianca;
Là, fra le nubi d'or;
N'andrò, n'andrò sola e lontana!
E fra le nubi d'or!

 

Una Cuestion de Honor

 

(en italiano)

¿Y entonces? … No ira lejos,

como el eco de la piadosa campana va,

Aquí, entre la nieve blanca;

Aquí, entre las nubes de oro;

¡Aquí, donde esta la esperanza, la esperanza

el pesar, el pesar, y el dolor!

 

¿Y entonces? ... No ira lejos, 

aquí, donde esta la esperanza, la esperanza

el pesar

solo y lejano!

 

(en ingles)

Dos hombres se enfrentan

cuando se enfrentan dos hombres,

es una cuestión de honor de los dos.

 

Cuando chocan dos hombres,

cuando dos hombres chocan

es una cuestión de honor de los hombres que chocan

cuando chocan dos hombres, cuando chocan dos hombres

 

Si uno gana o pierde, 

es una cuestión de honor

y la manera que usted elige, 

es esa la cuestión de honor.

 

No puedo decir qué es incorrecto o correcto

si el negro es blanco, o el día es noche

pero sé que cuándo se enfrentan dos hombres

es una cuestión de honor 

 

Si uno gana o pierde, 

es una cuestión de honor

y de la manera que usted elige, 

es una cuestión de honor

si uno gana o pierde, 

es una cuestión del honor

y la manera que usted elige 

es una cuestión de honor 

 

No puedo decir cuál es incorrecto o derecho

si es negro, es blanco o el día es la noche

pero yo sé que cuándo chocan dos hombres

es una cuestión de honor 

 

¿Y entonces? ... no ira lejos, 

como el eco de la campana piadosa va, 

aquí, entre la mujer del blanco de la nieve;

Aquí, entre las nubes de oro

¡ no ira, no ira solo y lejos!

¡Y entre las nubes de oro!


 

 


En la introducción a los tres artículos de boxe publicados dije que uno puede pelear por muchas razones. Omití decir que la principal es una cuestión de honor. Yo mismo he peleado muchas veces en mas de 20 años de práctica de artes marciales. Recuerdo que me había jurado que podía llegar a perder (porque siempre hay alguien mejor que uno) pero que siempre iba a quedar de pie frente al rival (uno podía llegar a perder, ¡pero con honor!). Lamentablemente, en un torneo del 6 de septiembre de 1979 una dolorosísima patada me dejo tirado en el tatami con un dolor intensísimo en mi pierna derecha. Recuerdo que todo perdió perspectiva, el lugar, el momento las luces, el uuuhhhh del público, incluso la humillación de la derrota. Allí estaba yo, boca abajo, inmóvil de dolor, rompiendo la promesa que me había hecho a mi mismo.

Recuerdo que el árbitro se me acerco muchísimo, hasta el suelo y me pregunto que si podía continuar, mientras yo, compungido no le contestaba nada, solo intentaba contener la intensidad del dolor. El árbitro llamo al médico. Yo, logre articular unas palabras. Le dije "me retiro. Ayúdeme a pararme y cierre el combate".  Así lo hizo y yo, parado solo sobre mi pierna izquierda hice el saludo oficial al rival y luego al jurado. Mi rival comenzó a saltar y a gritar festejando su victoria. A mi el médico me llevo al vestuario, donde no estaba mi Sensei, ni mis compañeros de dojo, ni ese público formado por familiares y amigos que aullaban en victorias estridentes de otros torneos. Para ellos era una situación menor.

 

Recuerdo que en ese momento, pero también a menudo me entristecía apreciar lo inmenso del abismo que me separaba de mis héroes, de esos héroes modernos que da el deporte (y para mí en aquella época, salvo Vilas, del deporte de combate). Tales héroes (aunque quizás no sea este el término que debería emplear) poseían todo: velocidad, calidad, técnica, y sobre todo el invicto y la palabra prometida. Poseían el amor de su público. Y ganar era la vida cotidiana.

Todo de lo que yo no llegaba a acopiar suficientes cantidades. Parecían capaces de atrapar en el aire esos instantes que pasan demasiado súbitamente para otros (para mi), y convertirlos en momentos gloriosos con una exactitud tan satisfactoria que solo aumentaba el abismo que nos separaba.

Pero en aquel vestuario, me pareció entender, o comenzar a vislumbrar, la idea de honor y las razones por las que uno se metía en estas lides de torneos. Años después, esta misma búsqueda fue la que me alejo definitivamente de torneos y a profundizar en el arte marcial, dejando definitivamente el deporte de combate.

 

Porque, básicamente, comprendí que lo más importante no es el aparente objetivo, sino el gesto, o la suma de gestos, que se hace para conseguir ese objetivo: esa adición de gestos da por resultado lo que podriamos deniminar "una cuestión de honor".

 

miércoles, 7 de abril de 2010

Henry Maske.

Rubio, zurdo, nacido en un pueblecito cerca de unos 40 kilómetros de Berlín de una madre secretario y de un padre chauffeur. Ya destaca muy temprano ganado todos los títulos a los que un amateur puede aspirar: triple campeonato de Europa, campeón del mundo y campeón olímpico de pesos medianos.

Es un boxeador, pero mas es un deportista aplicado y disciplinado, pero también es un alumno estudioso y modelo.

Maske decide pasar al profesionalismo, aunque este pasaje no apasiona a nadie durante tres años de combates, en los que no pierde jamás.

A principios de 1993 Henry Maske, invicto, pelea contra el norteamericano Prince Willliams. La apuesta de de gran tamaño porque el alemán apunta al titulo mundial de los semi-pesados. Henry se impone, como es su costumbre, sin brío, pero con regularidad, con constancia y precisión.

Su carrera se acelera vertiginosamente. La primera cadena privada alemana invierte en la campaña de Henry Maske.

 

¿Qué es lo que mas gustaba de Henry Maske sobre otros campeones? Que era un hombre simple y accesible a todos. La gente lo encontraba en las calles solo o con su familia. Porque para Henry su familia era muy importante y sostuvo con hechos y no solo con palabras que para él tener éxito era ser un buen padre.

 

Maske encadena victorias una detrás sin jamás convencer con un rotundo golpe de knoc out. El problema es que él no es un noqueador, él solo boxea, y lo hace bien. Pero que importa la manera si la victoria es siempre del él.

 

Cuando sale en fotos, o en la televisión, viste elegantemente trajes grises hechos a medida. Tiene el tipo perfecto, ese estilo clásico que gusta a todas las madres. Luego de años y años parece ser que definitivamente Maske gusta a todos los alemanes de todas las clases.

Sus adversarios vencidos uno tras otro le permiten conservar su invicto, pero cabe hacer una aclaración: Maske solo pelea en Alemania. Debería decir dentro de Alemania.

En Alemania, hace publicidades, es tapa de revistas, notas en los diarios, incluso es elegido el deportista allegan del año en 1993 (que por primera vez se le da ese premio a un boxeador).

Sus combates empiezan a ser cada vez mas espectáculo que peleas de boxeo, para darle mas espectacular a una forma de boxear que no la proveía.

 

Sin embargo, todo este éxito no lo marea y el sigue viviendo siempre en el mismo pueblo donde el vive desde hace 20 años. Maske no habla ni una palabra de ingles y es reciproco el interés de no pelear en Inglaterra, ni Francia, ni siquiera en los EEUU. Maske es un fenómeno excepcional, increíble pero solo intra y ultra alemán.

 

Ya estamos en 1996, una multitud enorme asiste a la pelea que a su vez es retransmitida por las cadenas RTL, MIERE y SAT 1. Luego de 30 combates ganados, 11 campeonatos del mundo sucesivos, Henry Maske se inclina por primera vez frente a Virgil Hill. Luego de que se anunciase la victoria del rival, Henry sorprende a todo el mundo y le pide al anunciador el micrófono. Saluda al público, felicita al nuevo campeón, y ante la sorpresa general anuncia su retiro. Luego silencio. Instantes en el que nadie entiende nada. Alguien del público empieza tibiamente a aplaudir e inicia lo que pronto fue una avalancha de aplausos, una ovación estridente. Su rival, el nuevo campeón, lo saluda y abandona el ring, junto con el se van todos y Henry Maske queda solo en el centro del ring. Levanta sus dos brazos y la ovación se vuelve aun más ensordecedora. Su adiós desgarra tanto al público presente como a los que veían y oían la pelea por tele y por la radio.

30 minutos duro la ovación sin disminuir ni un decibel. 30 minutos en la que la más grande estrella del boxeo alemán queda solo en el centro del ring, llorando inconteniblemente, siempre agradeciendo y levantando los brazos. 30 minutos retransmitidos en directo en donde, increíblemente, la audiencia no disminuyó ni un decimal.

 

sábado, 3 de abril de 2010

Palabra de Honor

Les anticipo que esta es la segunda de tres historias que les voy a contar. En esta historia tenemos en un rincón a Tyson, un peso pesado de 100 kilos que había conseguido combinar lo que ningún boxeador de su categoría había logrado hasta ahora: la velocidad con una potencia devastadora. Sus adversarios lo definían como un bazooka, un lanza-granadas.

"Cuando usted se enfrenta a Mike Tyson, usted entra en el desierto de la muerte" declaraba un condenado a entrar en este desierto.

Y en el otro rincón de la historia esta James "Buster" Douglas.

Douglas es un oscuro (no solo porque es negro) peso pesado…. Tal vez de Columbia, no sé muy bien, pero si creo que de Ohio, derrotado 4 veces en 10 años de carrera y que pelea en la indiferencia general, un año mas o menos antes en un combate mediocre en Las Vegas en donde Tyson (la vedette) derrotaba a un nuevo pretendiente al titulo.

 

Ambos se enfrentarían en Tokio. Una pelea impúdicamente hecha para "sacar" plata e ir preparando la pelea del siglo contra Holyfield (este sí uno de los mejores boxeadores de toda la historia del deporte). La pregunta que todo el mundo se hacia era ¿en qué segundo lo noqueará Tyson? ¿Cuanto tiempo durará? ¿Menos de un minuto? ¿Pasará el primer minuto? ¿Podrá mostrar su mejor performance y llegar a un segundo round? Este tipo de preguntas se las hacían no sólo los aficionados, sino también los mas de 100 periodistas especializados que conocían a Tyson y habían leído el historial de Douglas y estaban en Tokyo el 11 de febrero de 1990 para ver en qué momento Tyson decapitaba de un bazookazo a Douglas.

 

12 horas antes del combate había sido el pesaje. Allí se vio a un Douglas reconcentrado, serio, impertérrito (¿tal vez asumiendo una pose por la situación en la que se había metido? ¿Para mentir frente a los televidentes japoneses que veían en directo la ceremonia de pesaje? ¿Para engañar a quién?, o tal vez, démosle por ahora esa posibilidad, porque se había tomado muy en serio la pelea, que la había tomado como la cosa mas importante de su vida, porque se lo había prometido a alguien muy importante para él, a alguien a quien no le podía fallar).

A Tyson se lo vio llegar relajado, escuchando música en un walkman y en la posición de vedette que la prensa y la popularidad le otorgaba.

 

Momento del combate, luces sobre el ring, la gente super-excitada, griterío. 12 y 24, suena la campana y comienza el primer round. Primera sorpresa: Douglas parece no tener ningún miedo, como sí lo tuvieron otros rivales de Tyson. Segunda sorpresa: durante largos segundos Douglas domina claramente el inicio del match  y dejando al menos una cosa bien clara, James "Buster" Douglas subió al ring para batirse de igual a igual y no solo por el dinero. Sea cual fuere el final de la pelea, Douglas esta demostrando honor.

Tyson, visiblemente, aun no entro en la pelea y sin darse cuenta pasaron los primeros 3 minutos. Douglas sostuvo su dominio y ganó la apuesta "del primer round". Para muchos ya estaría bien, ya sería bastante, aunque para él no. Había hecho una promesa y debía sostenerla.

Ante la sorpresa general, mantiene el mismo trabajo y se queda también con el 2° round… y el 3°, y el 4°.

La gente esta atónita. Lo increíble estaba pasando, Douglas de pie, imponente, estaba dominando, ultrajando, al campeón del mundo. Tyson esta irreconocible.

Pero esto no puede durar. ¡Tyson no puede perder!, la dinamita de sus puños puede explotar en cualquier momento y dar vuelta la situación a su favor. Solo hace falta un solo golpe, solo acertar una sola vez un solo golpe y listo: Tyson conservara su título y su indiscutida supremacía.

 

Pero los round siguen pasando y todos se parecen.

 

Douglas logra conectar un duro golpe en el ojo izquierdo de Tyson. Tyson esta herido, tiene el ojo izquierdo cerrado, no es más invulnerable.

 

8° round, Tyson esta desesperado, al borde del agotamiento. Douglas parece tener la clave, Tyson jamás había peleado tanto tiempo. Lo tiene. ¡Lo tiene! Douglas ve el momento y piensa lanzar El Golpe, ese golpe que le dé la victoria y lo haga cumplir lo prometido. Y llega un uppercut de derecha extraordinario, perfecto, limpio y violentísimo… pero de Tyson, que electrocuta a James Douglas y lo envía a la lona.

 

…….Douglas mareado va cayendo y mientras cae va viendo las luces del ring recuerda lo que le insistió a su agente para que arregle la pelea ("solo esta pelea y nada mas, necesito el dinero"), recuerda que esta pasando el periodo mas sombrío de su existencia y que no logra revertirlo. Pensó, o vio a Lula, su madre muerta y oyó, o vio, a su mujer que lo dejó solo tres semanas antes de la gran pelea, que antes de dar el portazo le dijo que era un marica, que no servia para nada y que le dejaba a su hijo, que le había salido marica y llorón como él, que él no había sabido criarlo como un hombre. Douglas pensó sobre todo en la promesa que le había hecho a lo mas importante que tenía en la vida, Lama, su hijo de 11 años, por el que había casi dejado de entrenar las ultimas tres semanas, dedicándose a él. Douglas golpea con su mano izquierda el suelo del ring y se reprocha sobretodo, el que su hijo lo esté viendo (porque viajo con él a Japón)…….

 

Douglas mareado, pero consciente se levanta a los 9 y reprende el match. Le quedan solo 4 segundos a Tyson para liquidar la pelea y luego a otra cosa. Quisiera abrir un paréntesis aquí, porque el árbitro Octavio Meyran con 22 años de experiencia comete un error de principiante: en lugar de iniciar la cuenta, como la regla lo indica, que se dispara cuando el boxeador esta en el suelo (como continuando el segundero del cronometro del round), Meyran inicia su propia cuenta después de haber dirigido a Tyson hacia el rincón neutro, mientras que Douglas esta en la lona desde hace tres segundos. Por lo tanto, Douglas se levanta después de 12 segundos de estar en el suelo (cuando solo 10 alcanzan para establece un K.-O.) Fin del paréntesis.

 

10° round. James Douglas lanza ocho misiles y todos impactan en el objetivo: el mentón de Tyson. El campeón del mundo, golpeado durísimamente, se derrumba. Segundos históricos, Mike Tyson en la lona.

 

El match termina, lo increíble esta pasando, lo irrealizable se produce, Tyson pierde. En el medio del ring Douglas levanta los dos brazos.

 

James Douglas ha ganado el combate de su vida. En declaraciones previas a la pelea, cuando le preguntaron si sabía que cuando subiera ring iba a estar solo contra Tyson y que este iba a intentar arrancarle la cabeza a golpes de puño Douglas contesto que Tyson no le importaba, que solo le importaba una persona en el mundo y que iba a estar en el ring por esa persona.

 

Al final de la pelea Douglas abraza a Lama mientras llora y le dice "papá tiene palabra, papá cumple sus promesas", ambos lloran y Douglas mira al cielo agradeciendo a Dios.

 

Y es así. Hay existencias que se transforman súbitamente en el transcurso de un tiempo relativamente breve en sublimes. Luego de la pelea le preguntaron que pensaba hacer y cuando iba a defender el título, a lo que James Douglas respondió que no lo iba a defender, que se retiraba para ver crecer a su hijo. Douglas no volvió a pelear, y devino un obeso millonario con un hijo inseparable.