viernes, 1 de febrero de 2008

negras intensiones

Aun deploro su insidiosa actitud en llamarme charlatan en el simposio 2007 de Hamburgo. Asi lo ha espetado usted sobre mi persona cuando yo sostenia la necesidad de reivindicar los terminos drapetomanía y dysaesthesia aethiopis.

Alla usted con sus falsas ilusiones, pero quienes como yo han leido a los filosofos rumanos, saben muy bien que asi se la llamo a toda persona exitosa por parte de cieto sequito envidioso.

 

Recuerdo aun ese chillido desde el fondo de la sala, interrumpiendo mi disertacion, haciendo una mosion para silenciarme en la palabra. Bien podria yo hacer una lectura radical de vuestra psiquis, Herr Profesorr... mas!, al no ser radical me veo impedido en ley.

 

Si bien en ese momento me vi obligado a replicarle con una critica severa a vuestro libro de aforismos, no veo conexion alguna con las fotos que sospechosamente alguien hurto de mi cajon privado en mi laboratorio y las entrego a la prensa frivola.

 

Es de hacer observar que mi demoledora critica fue aplaudida por todo el auditorio presente.

 

En cuanto al "exito" que usted dice tener, le observare de la naturaleza espuria de dicho exito que aunque socialmente aceptado a regañadientes por la colectividad cientifica no es por ello indiscutido como lo es el mio, cuya victoria cientifica sobre el resto de los mortales es objeto de culto y admiracion.

 

Reflexione un poco, sobre su vana interrupcion y lea un poco mas al Doctor Samuel A. Cartwright y su Informe sobre las enfermedades y las características de la raza negra.
 
Monsieur Le Profeseur

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