Bien, olviden su historia, o lo que saben, o suponen de ella y traten de leer el mensaje contenido en el edificio, descifren las leyes de su lógica al margen de su historia.
Yo creo que la historia, lo que prestigia la historia, es el argumento analítico de quien intenta dilucidarla. Lo que conduce a síntesis, a deducciones y a formas de ver movimientos.
Cuando veo un edificio antiguo, sea este una catedral u otro, yo, prefiero no aventurarme en terrenos de crítica, o ese añadido a la crítica que es el juzgamiento. Veamos el edificio sin juicio de valor, sino más bien con un interés en el pasado y en especial como este sirvió para la concepción de la historia y la valoración de momentos sucedidos en el edificio, a su alrededor, o a causa de él.
Les cuento todo esto, ya que información sobre esta Catedral de León existe a montones y mucho más de lo que yo pueda decirles. Tal vez el consejo les ayude para hacer la lectura histórica de la catedral de León y descifren las leyes de su lógica histórica, al margen de su arquitectura e incluso de su verdadera historia.
Es en esta confrontación de sus deducciones, hipótesis y suposiciones y la historia llamada "real" donde se elaboran las mejores teorías.
No hay comentarios:
Publicar un comentario