domingo, 3 de julio de 2011

Un contador me dijo: sopesa costes/beneficio

Esto que les voy a comentar parece una soncera, pero pocos lo hacen. El caso es que la gente tiende a dar más importancia, casi siempre, al costo de una actitud, que a la importancia de la acción. Recuerdo un libro de Adolfo Bioy en el que contaba que el protagonista de la historia había sacado la entrada para ver una ópera y decía "ni bien me senté en mi butaca tuve la real dimensión de mi error". Para ejemplificar lo que quiero decir me voy a servir de ese personaje. Posiblemente antes de ir al teatro, el personaje pensó "si no voy al concierto, voy a perder el dinero que pague por la entrada", y esto es exactamente lo que decía al principio, una actitud donde se da mas importancia al coste.

Hay otra actitud en donde se da mas importancia a los beneficios instantáneos o más cercanos olvidando los resultados posteriores. En muchos casos, va perfecto aquella frase extraída del poema de Horacio "Carpe diem (quam minimum credula postero)".

 

Lo mas sensato es sopesar siempre los costes y beneficios de nuestras acciones. Esto es, claro, en el mejor de los mundos, ya que muchas veces se interpondrá nuestro carácter, nuestro ánimo y, por supuesto, lo que pide la escena.

 

No hay comentarios: