sábado, 17 de julio de 2010

La responsabilidad de la ciencia

Es curioso y no deja de ser una notable ironía la de Fritz Haber, químico alemán que se sentía muy patriota. Tanto así que trabajo en la Primera Guerra Mundial intentando proveer de un arma efectiva para su bando. Fue gracias a él que en 1915 Alemania consiguió lanzar el primer ataque con gas tóxico. Tan traumatizante que la imagen de la Guerra quedo en la Historia como la de un soldado con una mascara en la cara.

 

¿Como justificó este científico el uso del gas tóxico? Fritz Haber argumento que el uso del gas era un medio para acortar la guerra y así salvar vidas, incluso fue a más y después argumentó que el empleo de gas era "una forma superior de matar". Curiosamente, este mismo e increíble argumento de matar a muchísima gente hoy para matar a menos gente después fue el mismo argumento que posteriormente utilizarían los norteamericanos para justificar el uso de la bomba atómica.

 

Por supuesto que todo el mundo condenó los ataques como nuevas violaciones de los bárbaros alemanes a las normas de una legislación civilizada.

Y a propósito, todos los que al leer el párrafo anterior estaban de acuerdo en tildar a Haber o a Alemania de inmoral (o el epíteto que se les ocurra) deben tener en cuenta que la moral cambia según la conveniencia de quien tiene el poder (y esto cuenta tanto en tiempos de paz como en tiempos de guerra). Porque si el concepto de moralmente bueno no cambiase con el viento, ¿cómo explican que los mismos países que condenaron a Alemania por bárbara, poco después de incorporarse al combate también utilizaron gas tóxico? (Gran Bretaña, Francia y por supuesto EEUU). Y tanto es así que cuando termino la guerra la producción aliada de armas químicas era muy superior a la de Alemania y los científicos ya no criticaban la moral de Fritz Haber, sino que unos 5500 se dedicaban a la fabricación de armas químicas y los ataques con gas habían producido un millón de victimas entre ambos bandos. Entre esas víctimas estaba el soldado de primera clase Adolf Hitler, quien cegado temporalmente por una granada de gas británica, continuaba en el hospital casi un mes después, el día en que Alemania se rindió.

La misma moral (o la misma inmoralidad) aplicaron posteriormente, durante la Segunda Guerra Mundial, los Estados Unidos cuando utilizó por primera vez NAPALM en el bombardeo de Tokio (si quieren revolverse las tripas investiguen sobre el tema).

 

Fritz Haber recibe el premio Nobel en 1918. En 1933 Hitler sube al poder y el nuevo régimen no condecoró a este científico como el más alemán de los alemanes por su patriotismo, ni le agradeció el haber prestado fieles y leales servicios a su patria, sino que a partir de las leyes antisemitas (porque Haber era judío) fue obligado a abandonar su puesto y su país.

Mientras Fritz buscaba cobijo en otras tierras, la empresa farmacéutica Bayer fabricaba otro invento de Fritz Haber el gas Zyklon B con el que los nazis exterminaron a millones de judíos en las cámaras de gas. La empresa Bayer tenía muchísima menos ética, o conducta moral ya que como miembro del consorcio IG Farben usaba la mano de obra gratuita que proveían los prisioneros de Auschwitz, que eran los mismos que luego se exterminaban con el mencionado gas fabricado por ella misma.

 

 

 

Alguna vez hable sobre este tema con un amigo doctorado justamente en química, y un humanista practicante. Recuerdo que le comente, a propósito de los gases tóxicos en la primera gran guerra, que esa fue la primera gran derrota moral de la humanidad. A lo que él me contesto que esa derrota moral ya la habíamos tenido antes, porque ¿Dónde está la línea en lo que es moral utilizar en una guerra y lo que no lo es?

 

Mi amigo Sam tal vez tenga razón. Porque es cierto que en nuestros genes llevamos la lucha (y por lo tanto la guerra) y esto es algo que está más allá de toda duda. Somos animales sociales y tenemos jerarquías en nuestras sociedades. Los personajes como Ghandi son una excepción. Digna de admiración y respeto, pero desgraciadamente una excepción. Ya entre seres mas primitivos en la escala evolutiva, como son los chimpancés hay peleas entre tribus y por jerarquías o falta de respeto en el mismo clan y también existe entre ellos el canibalismo y el infanticidio.

 

Pero sin embargo, queda una pregunta sin responder: ¿una pelea, para ser justa, debería ser cuerpo a cuerpo o puede utilizarse cualquier herramienta para vencer al enemigo?

 

 

 

Hace unos días le comente a Sam que iba a escribir sobre Fritz Haber y si recordaba lo que alguna vez hablamos. Me respondió que si, y me agrego que no me olvide decir que sin el descubrimiento de Haber, la primera guerra mundial tal vez solo habría durado unos pocos meses… ¿quien lo podría decir con certeza?, pero la paz en Europa no habría podido durado mas tiempo. Porque en 1900 la agricultura europea apenas conseguía alimentar a los 400 millones de europeos, que se peleaban constantemente entre si por cada palmo de tierra donde poder obtener más comida y si hoy somos 750 millones de europeos, y hay comida para todos, y vivimos en paz todo eso es gracias a los nitratos producidos por el método de Haber. O sea que sin el proceso Haber-Bosch, el mundo no podría mantener a más de 2000 millones de personas.

Cumplo entonces con Sam en decir esto y también en decir la frase con la que se despidió: me dijo, "cito mal a Weimberg porque no tengo buena memoria: La ciencia nos puede proveer de los instrumentos para matarnos, pero no es ella la que nos da los motivos".

 

 

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