jueves, 28 de junio de 2007

El volar es un placer que nos puede suceder

Como decía, cuando hablo de esta idea mía de viajar en dirigible no siempre encuentro quien la acepte y me retruque lo del famoso accidente filmado por las cámaras de cine norteamericanas. Sin embargo, por aquella época este medio de transporte se encontraba en funcionamiento para la explotación de líneas aéreas de pasajeros que cruzaban el Atlántico. Los dirigibles eran de gran tamaño y su visión en vuelo generaba una altísima expectación tanto para los pasajeros como para los observadores.

 

Sin embargo, los problemas técnicos que se presentaban no pudieron ser resueltos en aquella época (no olvidemos que las bolsas contenedoras del gas eran tripas de buey infladas, y que sus válvulas eran tan primitivas que dejaban escapar lenta o bruscamente su contenido). Los problemas del hidrógeno eran tan graves que finalmente se renunció a su explotación después del trágico accidente del Hindenburg.

 

Pero antes que esto hubo lineas de dirigibles que volaban a todas partes del mundo. Incluso en Alemania se habían hecho estaciones para dirigibles por todo el país. La idea era que en los edificios se instalen torres para que allí sean las estaciones, basándose en la flotabilidad del dirigible en el aire. El Empire Sstate construyo una torre de amarre para dirigibles, es mas, fue parte original de la construcción del edificio.  Un intento de atracar un dirigible privado tuvo éxito. Pero, durante un segundo intento, en septiembre de 1931, un dirigible de la Armada estuvo a punto de ponerse en posición vertical y acabar con las celebridades que asistían al histórico acontecimiento, mientras el agua del lastre empapaba a los peatones que deambulaban varios bloques más lejos. Entre paréntesis y a propósito del Empire State, ya que hablamos de accidentes, como ya dije, un dirigible amarro en la torre a tal efecto, pero el 28 de julio de 1945, un bombardero B-25 del ejército del aire norteamericano se estrelló contra el edificio en el piso 79.  Murieron catorce personas. Los daños causados al edificio se valoraron en 1 millón de dólares, pero la integridad de la estructura no resultó afectada. Lamentablemente faltaba solo un mes y algunos días para terminar la 2° Guerra, y utilizar esta excusa para armar algún que otro conflicto bélico por allí.

 

Una de las cosas mas extrañas sobre estos aparatos es que jamas se los dejo de fabricar. Sí terminaron sus vuelos comerciales, ya que nadie quería subir por temor a ser filmados mientras saltaban cubiertos en llamas (ay esa timidez!), pero se siguieron construyendo para usos militares, científicos, mas tarde para publicidad, y para base de las cámaras de televisión, e incluso para uso privado y turístico.

 

Es que teniendo algunas contras como ser, el riesgo de sobrecarga por nieve o escarcha, una mala relación entre el volumen total y el volumen de carga y una mayor vulnerabilidad a los vientos, tiene muchas y notables ventajas, comenzando por ser un transporte económico (mejor tasa tonelaje/autonomía después del transporte marítimo), las eventuales fallas de los motores son menos críticas que en un avión (incluso la detención total de estos es mucho menos critica que en los aviones), pueden aterrizar prácticamente en cualquier sitio, sin requerir infraestructura importante, tiene una mayor autonomía, vuelo silencioso, menor contaminación que los aviones. Se puede poner como contra cosas que para mi son a favor, como su baja altitud de vuelo, lo que hace apreciar el paisaje y da la idea de viaje, a diferencia de los modernos aviones, en donde uno ve solo el respaldo del de adelante. La lentitud de los dirigibles se lo toma como otro defecto, en estos tiempos donde uno debe estar apurado incluso en vacaciones. Y es un defecto su maniobrabilidad, pero esto solo dependiendo de que uso se le dé.

 

Estoy al corriente de una buena cantidad de dirigibles que siguen en funciones, y de algunos que son usados en turismo en el Viejo Continente (nada mejor para mostrar chateaux y otras atracciones turísticas) la empresa alemana Zeppelin Luftschifftechnik GmbH, tiene volando desde 1997 su Zeppelin-N07 con capacidad para 12 pasajeros. Zeppelin-NT Technics tiene contratos preliminares para cinco dirigibles con clientes en Suiza (2 ejemplares) y Alemania (3). Por otra parte American Blimp tiene planeado su dirigible "Millennium", con capacidad para 40 pasajeros. En Holanda, la Rigid Airship Design está construyendo un dirigible de 180 metros de largo y otra empresa alemana que está trabajando en aeronaves de esta categoría es la compañía CargoLifter, con base en Brand. Los dirigibles CL.160 tendrían 260 metros de largo por un diámetro de 65 metros. Más ambiciosos son los proyectos de la empresa sudafricana Hamilton Airship Company, que pretende operar vuelos de lujo para pasajeros, sobre el Atlántico, desde Johannesburgo, en un dirigible de tamaño similar al "Hindenburg" ( http://www.aerosml.com/Aeroscraft%20Info.asp) y los del Instituto de Aviación de Moscú, que pretende fabricar un original aparato al que llaman "Thermoplane", que sería un dirigible sin lastre, capaz de transportar grandes cargas, principalmente en Siberia.

 

Yo aspiro a ir algún día al Lago de Constanza, allí entre Alemania, Suiza y Lichtenstein, y hacer un vuelo por la región en uno de esos paseos turísticos en dirigibles, silenciosos, cómodos y seguros, y vivir personalmente uno de los mayores espectáculos: poder contemplar tranquilamente una vista grandiosa. Volviendo a la vieja idea de que un viaje sea un placer.

1 comentario:

Herrr Profesorrrr dijo...

Enhorabuena! Me alegra muchísimo que vuelvan a construirse estas maravillas. Creo que diste en el clavo sobre el verdadero atractivo de estos artefactos... La "sensación de viaje". Se me antoja que debe tener el mismo atractivo que navegar.