sábado, 16 de octubre de 2010

Football fútbol fulvo VI

Así que como les dije, en cada época se cree que se esta en el fin de las invenciones y descubrimientos posibles. Se supone que ya nada va a revolucionar el período evolutivo en el que se vive, que uno surfea la ola de la perfección. Recuerdo en el '92 o '93, un libro llamado "The End of History and the Last Man" de Francis Fukuyama….

Pero estábamos hablando de fútbol, Y teníamos una Inglaterra invencible en su propio suelo, convencida de que es la mejor selección del mundo, con los mejores jugadores del mundo y que tiene el mejor sistema del mundo (que por otro lado considera el único posible, el WM).

Es en este clima de "nada nos puede pasar, es a los otros de hacerse problemas por nosotros" que se presenta un 25 de noviembre de 1953 ante la selección húngara.

La elección de Hungría para este partido internacional ("amistoso", comos e dice habitualmente…) por parte de Inglaterra se debe en gran parte al azar. Observo que entrecomille la palabra "amistoso" ya que estos partidos muchas veces tiene poco de amistoso, sobre todo en Inglaterra, que tenía que defender su condición de invicto como local. Insisto en algo que ya otras veces dije, sin que medie la televisión y la transmisión en directo (estaba, claro la radio transmisión, que no es lo mismo, ya que hay un relator que nos cuenta). Por ejemplo, Inglaterra se impone de local frente al reciente campeón del mundo, Italia en un partido amistoso del 14 de noviembre de 1934. La historia dice que ya a los 10 minutos de juego los ingleses ganaban 3 a 0. Habría que observar que los ingleses pegaron tanto desde el inicio que en el segundo minuto Luis Monti, de Italia fue sacado en camilla con una fractura en el pie. Por aquella época el reglamento no permitía cambios, por lo que los italianos jugaron el resto del partido con solo 10 jugadores, lo que no impidió a los ingleses seguir pegando impunemente y tomando "ventajas".

 

Bueno, parece ser que un secretario de la federación inglesa asistió a los juegos olímpicos del 52 y quedo impresionada con el campeón de fútbol. Inmediatamente se le hace la invitación a jugar en Inglaterra. Ubíquense en la época y van a ver que Hungría entra dentro del bloque de países soviéticos de la post-guerra, o sea que la invitación tiene que pasar, primero, por la aprobación del Partido Comunista de Budapest. Durante muchos meses el partido no aprueba la visita de Hungría a Inglaterra, por cuestiones políticas, pero también sabía que Inglaterra de local era invencible. Si están ubicados en la época, manténgase así e imaginen lo que era viajar esas distancias entre los años 30 a los 50, atravesando dos guerras mundiales. Los jugadores no llegaban en el mejor estado y tampoco eran recibidos de la mejor forma, para luego tener que afrontar un partido de primera categoría con arbitrajes siempre dudosos.

El Comité del Partido Comunista le dice al presidente de la federación húngara que solo va a autorizar el match si garantiza la victoria. Éste se cubre diciendo que el fútbol es siempre incierto y nadie puede garantizar una victoria. Durante meses la cosa esta allí, sin autorización del Comité.

 

El presidente de la federación húngara habla con el entrenador del equipo nacional, una persona muy reflexiva, una persona que trabaja mucho usando el cerebro. El entrenador analiza la estructura del equipo de Inglaterra y luego de pensar y hacer estudios y esquemas sobre papel y sobre el césped le dice algo que es trasmitido por el presidente de la federación de fútbol al Comité, y con lo que consigue la autorización para ir a Inglaterra a disputar el encuentro, le dice: yo no puedo garantizar la victoria, seria irreal hacer esa promesa, pero si se libra el match, Hungría hará una demostración de fútbol tal que va a asombrar al mundo entero.

 


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